viernes, 26 de diciembre de 2008

Dead or Alive: Hanzaisha


¿Cansado de finales sosos y predecibles? Entonces bienvenido al mundo Miike donde no es que la realidad supere la ficción, es que la sorpresa lo supera a todo.

Nos encontramos ante lo que podría ser una trama que se basa en tres pilares, como un triángulo: la policía, las triadas chinas junto con la yakuza japonesa y otra banda que surge contra la unión de las anteriores.

El argumento como se puede imaginar es sencillo de seguir, incluso teniendo en cuenta que no estamos ante una narración fílmica norteamericana, que es a lo que estamos acostumbrados. De todas formas la película cuenta con un elemento típico de los filmes, focalizar, personalizar los sujetos que están en conflicto, por eso es por lo que el filme se centra en tres personajes, fundamentalmente, para explicarnos todo lo que sucede en ese mundo.

Estos personajes no dejaran de cambiar durante todo el largometraje lo que hace imposible, además de un crimen, suprimir algún plano, aunque no sean del gusto del espectador. Está claro que Miike piensa y sabe lo que hace, estudia cada secuencia en profundidad y no regala nada, nada es fortuito, todo tiene un porqué.

Es cierto que algunas veces la película puede ser predecible, pero a mi parecer eso es sólo un juego del director. Hacernos sentir cómodos, hacernos sentir que controlamos la situación, que hemos sabido leer su mente y sabemos lo que va a pasar a continuación y de repente trastocarnos toda la idea de la que partíamos y demostrarnos que es él el único que controla su película.

No hay comentarios: